El villano John Kreese existió…
Y fue un excelente marketer.
Y es que parece que los creadores de Karate Kid se basaron en el Conde Juan Raphael Dante para crear al villano de la película llamado John Kreese… ese karateca que era más malo que los malos y que entrenaba a sus estudiantes con el lema de “no mercy!” para acabar con su enemigo número 1 Daniel LaRusso.
Y resulta que ese tal Conde Dante…
En realidad se llamaba John Keehan…
Pero cambió su nombre a…
Conde Juan Raphael Dante.
Y afirmando que provenía de la realeza española. Y es que este karateca sabía muy bien lo que estaba haciendo a nivel de marketing.
Dante tenía un dojo…
Y al igual que Karate Kid…
O Cobra Kai…
Enviaba a sus estudiantes a provocar a otros dojos para pelear. Pero se le fue tanto de las manos que uno de sus propios estudiantes terminó muerto en “combate”.
Sí, estaba loco.
Pero…
Su marketing funcionaba.
Sobre todo los anuncios que compraba en los comics de la época (los 60 y 70) para promocionarse como el Conde de la Muerte y su propio sistema llamado “El Baile de la Muerte” para ser totalmente letal en la calle.
Pero volviendo a lo anterior…
A pesar del mal que hizo…
Es decir…
Matar a uno de sus estudiantes…
El tipo fue un genio del marketing… sobre todo cuando decidió cambiar su nombre para promocionarse mejor.
Ahora…
No estoy sugiriendo que cambies tu nombre para hacerte conocido ni que inventes una historia como la que él inventó.
Hablo de algo más profundo.
Y que te ayudará a vender más.
Especialmente con el email marketing.
Hablo de ser polémico y de autopromocionarte descaradamente. Es la única manera que tenemos de destacarnos entre todo el ruido que hay tanto online como offline, donde todos dicen que son expertos y que tienen el mejor producto.
