Si entiendes cómo usar esta táctica de storytelling en tus cartas de ventas o anuncios, vas a ser capaz de convencer a tu potencial cliente de comprar aquello que estás ofreciendo.
Mira…
En las novelas, películas y series, los autores o guionistas hacen uso de algo llamado “conflicto interno”. Y para explicarlo, te voy a dejar un extracto de un curso que vendía sobre storytelling (pero que ya no lo vendo más).
*****
Muchas veces cuando queremos cambiar, hay algo que nos frena y nos impide empezar. O a veces empezamos. Pero damos solo unos pocos pasos y abandonamos.
Nos quedamos en nuestra zona de confort.
Solemos comportarnos así porque tenemos miedo a cambiar. Tenemos miedo al fracaso y al rechazo. Miedo a hacer nuestro mejor esfuerzo y fracasar en el intento. O miedo a hacer el ridículo.
Este miedo a cambiar puede que le haya sucedido al héroe de tu historia (un cliente pasado o tú mismo). Y si es así, es importante que lo cuentes en la historia, ya que es muy probable que tu audiencia esté pasando por lo mismo.
A veces, cuando las personas están convencidas de que un producto realmente funciona (en este caso, el tuyo), puede que aún así no lo compren.
Esto sucede porque en realidad tienen miedo a realizar el cambio necesario, ese cambio que los llevará a alcanzar sus objetivos.
Tienen miedo a dejar de comer sus comidas favoritas.
Tienen miedo a dar el primer paso para hablarle a la mujer que les gusta.
Tienen miedo a gastar los primeros 10 dólares en anuncios de Facebook para llevar tráfico a sus webs.
A esto se lo denomina conflicto interno.
Entonces…
¿Cómo hay que utilizar la historia para que tu audiencia deje de tener miedo al cambio y se decida a comprar tu producto?
La respuesta corta sería contar que tu héroe tomó el coraje suficiente para superar sus miedos más profundos y transformar su vida definitivamente.
*****
Muy bien. Termino allí el extracto.
No es absolutamente necesario introducir el conflicto interno en, por ejemplo, una historia que estás contando en una carta de ventas. Pero si lo quieres hacer, una buena idea es introducirlo al final de la carta, antes de presentar el botón de compra.
Y otro punto importante es que puede que no funcione en todos los casos.
En algunos nichos funciona mejor que en otros, ya que todo depende del tipo de audiencia. El conflicto interno funciona en aquellos nichos donde el potencial cliente siente miedo a actuar. Por ejemplo, el nicho de la seducción.
Aquí tienes un ejemplo:
Pero este libro no solo tiene las mejores tácticas para seducir a una mujer, sino que también te enseña cómo trabajar en ti mismo.
Porque…
Seamos sinceros.
Saber qué decir no es lo que más te detiene.
Lo que más te frena… es lo que nadie quiere admitir.
Es ese momento en que ves a una mujer que te gusta y sientes que se te paraliza el cuerpo. Que tu mente se llena de excusas: “No es el momento”, “Seguro tiene novio”, “Voy a quedar como un idiota”.
Esa vocecita interior, en vez de ayudarte, te encierra. Y te domina, alejándote de la vida que deseas tener.
Yo también viví con esa voz por años. Hasta que decidí que no iba a dejar que me siga robando oportunidades.
Decidí finalmente actuar y dejar de tener miedo. Como la decisión que debes tomar ahora mismo para presionar el botón de abajo para ordenar una copia de este libro… y que todavía estás a tiempo, hasta que decida sacarlo de la venta el próximo día X del mes Y del año Z.
Ok…
Esa es una de las formas en que usarías el conflicto interno en una carta de ventas.